Brai reviewed Las llamas del incendio by Mike Lightwood
Review of 'Las llamas del incendio' on 'Goodreads'
5 stars
Este libro es el final de un viaje, sin lugar a dudas.
Todavía recuerdo, hace ya muchos años, cuando Mike me pasaba partes de lo que llegaría a ser "El fuego en el que ardo". En aquella época me costaba salir de la cama, vivía sole y el simple hecho de existir se sentía como una lápida sobre el pecho.
Sin embargo, esperar a que me pasara más páginas era ilusionante, a veces hasta inspirador.
Por eso comprenderéis que esperase este final con impaciencia. Y debo ser sincere: se me ha hecho muy cuesta arriba leerlo. Y no, no es porque sea un mal libro o esté mal escrito, más bien, todo lo contrario. Hay partes tan crudamente descritas que tuve que pararme a respirar para seguir adelante.
En este libro encontramos a un Óscar repuesto después de todo lo que pasó en EFEEQA, sobrellevando sus propias cicatrices, pero que …
Este libro es el final de un viaje, sin lugar a dudas.
Todavía recuerdo, hace ya muchos años, cuando Mike me pasaba partes de lo que llegaría a ser "El fuego en el que ardo". En aquella época me costaba salir de la cama, vivía sole y el simple hecho de existir se sentía como una lápida sobre el pecho.
Sin embargo, esperar a que me pasara más páginas era ilusionante, a veces hasta inspirador.
Por eso comprenderéis que esperase este final con impaciencia. Y debo ser sincere: se me ha hecho muy cuesta arriba leerlo. Y no, no es porque sea un mal libro o esté mal escrito, más bien, todo lo contrario. Hay partes tan crudamente descritas que tuve que pararme a respirar para seguir adelante.
En este libro encontramos a un Óscar repuesto después de todo lo que pasó en EFEEQA, sobrellevando sus propias cicatrices, pero que se adentra en un mundo de autodescubrimiento al que sólo se pueden adentrar las personas LGBT cuando se acerca la veintena (producto de este sistema cisheteropatriarcal). Un Óscar que se sabe dueño de sus propias llamas y dispuesto a hacerse muchas preguntas.
Por otro lado vemos a un Darío que no para de crecer, que se ha puesto una meta en la vida, ahora acompañado de una red de vínculos sana que le permite madurar.
Y, por último, se nos completa la historia con la visión que tiene Sergio, nuestro superhéroe, de momentos que, unos ya conocidos, otros nuevos, tienen la capacidad de trasmitir una ternura extremadamente humana.
Todo esto se adereza con los personajes que el autor nos ha ido presentando a lo largo de la saga (Fer, Pablo, Guille, Marta, Sara...) y nuevas personalidades que dotan al conjunto de un gran realismo -y que te hacen envidiar esa pequeña familia elegida-. Ver a une personaje enebé me ha hecho tremendamente feliz.
Dadle una oportunidad a esta saga de libros que termina (a menos que Neo nos haga el favor de publicar más cosas) y dadle un abrazo muy fuerte a Óscar, Sergio y Darío vosotros, que yo ya los he arropado esta noche, les he preparado un té y no los pienso soltar.