¿Fluir con el tiempo o nadar contra él?. La premisa es conocida: un día de la marmota. Pero creo que cada individuo tomaría ese evento de una forma distinta y en éste caso Tara, la protagonista, después de intentar buscarle un razonamiento lógico decide simplemente esperar a que todo fluya con alguna resignación encima. La naturaleza humana es ser prisioneros del tiempo, no es algo de lo que podemos escapar mientras transitamos en él; una fractura en él sólo definiría la forma en que nosotros lidiariamos con esa situación: luchar contra él, buscar salidas, resignarse, ¿vivir?. Bastante interesante, es una historia con varias aristas: el conocerse, el sobrevivir, el amor y lo importante del paso del tiempo.