En esta segunda parte, nos encontramos a Ottavia Salina y Farag Boswell como una pareja consolidada, con trabajos estables y que les motivan, es entonces cuando aparece matrimonio de ancianos con una propuesta extraña y llamativa, que les obliga a contactar a su amigo, el gran Catón a pesar de que se supone que nadie debe saber de su existencia.

Nuevamente se ven envueltos en una serie de aventuras y pruebas difíciles para alcanzar y verificar un nuevo secreto, que provocará que sus creencias más profundas sean cuestionadas.

Precisamente por esas inquietudes que plantea en cuanto a la fe, es que me ha gustado mucho, hoy en día es difícil aceptar cualquier doctrina en forma irrefutable, así que, si sobrevives a los interrogantes, seguro que saldrás fortalecido.

Recomendado, no apto para cristianos que no son capaces de cuestionar las bases de su fe.