Antonio P reviewed Leviathan (Penguin Classics) by Thomas Hobbes
Review of 'Leviathan (Penguin Classics)' on 'Goodreads'
1 star
El libro está dividido en cuatro partes:
I. Del hombre. Ocupa el 75% del libro. Me imagino a Hobbes como un señor mayor acurrucado delante de su chimenea refunfuñando de todo, sentando cátedra de cómo son las cosas, y que todo aquél que no siga su método o esté de acuerdo con sus conclusiones es porque está alejado de la verdad. Sí que hay alguna cosa que me ha gustado: "En todas vuestras acciones, considerad frecuentemente aquello que queréis poseer, porque es la cosa que dirige todos vuestros pensamientos al camino para alcanzarlo."
"El valor o estimación del hombre es, como el de todas las demás cosas, su precio; es decir, tanto como sería dado por el uso del poder. Por consiguiente, no es absoluto sino una consencuencia de la necesidad del jucio de otro."
Habla de algunos conceptos: el derecho de naturaleza, que es la libertad de cada hombre …
El libro está dividido en cuatro partes:
I. Del hombre. Ocupa el 75% del libro. Me imagino a Hobbes como un señor mayor acurrucado delante de su chimenea refunfuñando de todo, sentando cátedra de cómo son las cosas, y que todo aquél que no siga su método o esté de acuerdo con sus conclusiones es porque está alejado de la verdad. Sí que hay alguna cosa que me ha gustado: "En todas vuestras acciones, considerad frecuentemente aquello que queréis poseer, porque es la cosa que dirige todos vuestros pensamientos al camino para alcanzarlo."
"El valor o estimación del hombre es, como el de todas las demás cosas, su precio; es decir, tanto como sería dado por el uso del poder. Por consiguiente, no es absoluto sino una consencuencia de la necesidad del jucio de otro."
Habla de algunos conceptos: el derecho de naturaleza, que es la libertad de cada hombre de usar su propio poder como quiera, para la conservación de su propia naturaleza (su propia vida); la libertad, que se entiende como ausencia de impedimento externos; y la ley de la naturaleza, que es lo que impide a un hombre hacer lo que puede destruir su vida o privarle de los medios de conservarla, o bien omitir aquello mediante lo cual piensa que pueda quedar su vida mejor preservada. A partir de ahí, dice que "cada hombre tiene derecho a hacer cualquier cosa, incluso en el cuerpo de los demás. Y, por consiguiente, mientras persiste ese derecho natural de cada uno con respecto a todas las cosas, no puede haber seguridad para nadie de existir durante todo el tiempo que ordinariamente la Naturaleza permite vivir a los hombres." por lo que cada hombre tiene que esforzarse por la paz, y si no lo consigue, pues a la guerra.
"La definición de injusticiano es otra sino esta: el incumplimiento de un pacto". Da mucha importancia al contrato/promesa/pacto como base de las relaciones humanas. Pero no nos engañemos, que el pacto no se mantiene porque somos buenesitos, sino que los pactos se mantiene por la amenaza de las armas.
II. Del Estado. Junto con la parte final de la parte anterior, esta la parte más interesante del libro. Se parece mucho al Príncipe de Maquiavelo. Militarista, monárquico y religioso. En esta parte sobre todo destaca la parte de monárquico y militarista. "Siendo indivisible esta gran autoridad, y yendo inseparablemente aneja a la soberanía, existe poca razón para la opinión de quienes dicen que aunque los reyes soberanos sean singulis maiores, o sea, de mayor poder que cualquiera de sus súbditos, son universis minores, es decir, de menor poder que todos ellos juntos." Me recuerda al Juramento de les reyes aragoneses: "Nos, que somos y valemos tanto como vos, pero juntos más que vos, os hacemos Principal, Rey y Señor entre los iguales, con tal que guardéis nuestros fueros y libertades; y si no, no”. Aunque le quita un poco la gracia de que el Rey es elegido por dios y que por eso no lo votamos.
"Si un súbdito tiene una controversia con su soberano acerca de una deuda, o del derecho de poseer tierras, o bienes, o acerca de cualqueir servicio requerido de sus manos, o respecto a cualquier pena corporal o pecuniaria fundada en una ley procedente, el súbdito tiene la misma libertad para defender su derecho como si su antagonista fuera otro súbdito, y puede realizar esa defensa ante los jueces designados por el soberano." Parece bastante poco absolutista, pero que el Rey elija a los jueces jeje.
III. De un estado cristiano. Sin más.
IV. Del reino de las tinieblas. Es un poco clickbait del siglo XVII. "Lo que ofende a los individuos no es que estén gobernados como cada uno de ellos desearía por si mismo, sino como considera adecuado el representante público, ya sea un hombre o una asamblea de hombres, es decir, por un gobierno arbitrario: por ello dan nombres desagradables a su ssuperiores ignorando (hasta acaso un poco después de una guerra civil) que sin tal gobierno arbitrario semejante estado de guerra será perpetuo y que es el hombres y sus armas, y no las palabras y las promesas, lo que afirma la fortaleza y el poder de las leyes".
El libro termina de una forma que no me esperaba: "haced que sean silenciados también y castigados los maestros en virtud del poder de aquel a quien está encomendada la tutela de la tranquilidad pública, es decir, por la autoridad civil: porque cualquier género de potestad que lo eclesiásticos asuman (en algún lugar donde estén sujetos al Estado) en su propio derecho, aunque lo denominen derecho divino, no es sino usurpación.
Todo el libro pensando que es un señoro absolutista monárquico cristiano para que al final me dé cuenta de que durante todo momento estaba haciendo una distinción entre el poder religioso y el poder civil. Podría volver a leerlo con esta otra perspectiva, pero no me ape. No sé si he terminado de cuadrar por dónde va Hobbes en todo momento. Ha sido bastante pesado pero por lo menos el libro no es muy largo.
PS: se llama Leviatán porque "Hecho esto, la multitud así única en una persona se denomina Estado, en latín Civitas. Esta es la generación de aquel gran Leviatán, o más bien (hablando con más reverencia) de aquel dios mortal, al cual debemos, bajo el Dios inmortal, nuestra paz y nuestra defensa, porque en virtud de esta autoridad que se confiere por cad hombre particular el Estado posee y utilizar anto poder y fortaleza que por el terror que inspira es capaz de conformar las voluntades de tdoso ellos para la paz en su propio país, y para la mutua ayuda contra sus enemigos en el extranjero." Me encanta que defina el Estado como un dios mortal.