En realidad, todo empezó en una lista de correo donde apareció la convocatoria: #OccupyWallStreet. Are you ready for a Tahrir moment? La habían mandado Kalle Lasn y Micah White, dos veteranos de la protesta, editores de la revista Adbusters, un fanzine anticapitalista famoso por usar el lenguaje de la publicidad para destruir la publicidad. Y Messina había copiado literalmente el hashtag de los canales del IRC. Nada nuevo bajo el sol, pero el principio de una leyenda.